viernes, junio 28

Nunca te escribí una sola palabra, tú mandabas correos algunas veces. Nunca supe tu nombre. Enviaste dos fotos, un poema, una canción, un video, creo que muchas veces me dijiste cobarde. Nunca supe tu nombre. Traté de buscarte por otros lados, nunca de frente, era difícil. Yo estaba muy triste en ese tiempo, apenas pensaba en lo que decías. Nunca supe tu nombre, nunca tuve el coraje para saberlo. Ya no escribes, pero sospecho que sigues siendo alguien que anda por ahí.
Si años lejanos lejos del aquí 
te vez alzando puentes hoy 
si te trajeron hasta donde estás 
traes carretera en el quizás 

Si ves que el aire deja de bailar 
Es que un tornado de abrazó 
si ves que todo el color se va 
le falta un arco al iris ya 

Si se te queda un paso en el ayer 
siempre hay algún retrovisor 
si algún instante te hace de papel 
es que ya estabas por cortar 

Si sientes que algo aprisa se te fue 
canta misterios tu reloj 
no existe técnica para vivir 
cuando no sabes olvidar 
Tornazul 
David Aguilar
Independiente
México 2005

domingo, junio 23



On voudrait revivre.
Ça veut dire :
On voudrait vivre encore la même chose.
Refaire peut-être encore le grand parcours,
Toucher du doigt le point de non-retour
Et se sentir si loin, si loin de son enfance.
En même temps qu'on a froid, quand même on pense
Que si le ciel nous laisse on voudra
Revivre.
Ça signifie :
On voudrait vivre encore la même chose.
Le temps n'ai pas venu qu'on se repose.
Il faut refaire encore ce que l'on aime,
Replonger dans le froid liquide des jours, toujours les mêmes
Et se sentir si loin, si loin de son enfance.
En même temps qu'on a froid, qu'on pleure, quand même on pense
Qu'on a pas eu le temps de terminer le livre
Qu'on avait commencé hier en grandissant,
Le livre de la vie limpide et grimaçant
Où l'on était saumon qui monte et qui descend,
Où l'on était saumon, le fleuve éclaboussant,
Où l'on est devenu anonyme passant,
Chevelu, décoiffé, difforme,
Chevelu, décoiffé, difforme se disant
On voudrait revivre, revivre, revivre.

On croit qu'il est midi, mais le jour s'achève.
Rien ne veut plus rien dire, fini le rêve.
On se voit se lever, recommencer, sentir monter la sève
Mais ça ne se peut pas,
Non ça ne se peut pas,
Non ça ne se peut...



Revivre
Revivre
Gerard Mánset
EMI France
1991







sábado, junio 15

Verse al espejo en la oscuridad, tener la sensación de que aunque hubiera luz, nada se reflejaría en él.
Hace mucho tiempo que está allí, un golpe de suerte que nunca dura mucho tiempo.

jueves, junio 6

Odiaba bañarme en tu baño. Tenías una tina verde, sucia, llena de sarro y desperdicios; jamás me dejaste bañarme en ella, decías que no funcionaba, que si me bañaba allí me acabaría dando una infección de vías urinarias; a veces yo no creía que no funcionara, pensaba que te daba flojera ayudarme a poner el agua y después a sacarla. Al rededor de la tina había toda clase de botellas vacías, o a la mitad, que tenían años allí. Tu madre ponía sus chones a secar en las llaves de la tina, los colores que mejor recuerdo eran: blanco y rosa. No sé si ponía de otros colores u otras ropas, los calzones se me grabaron. El baño tenía dos ventanitas que no servían absolutamente para nada, excepto para dejar pasar un poco de luz y sonidos, no sé para qué estaban allí, supongo que para nada y de todos modos no importaba. El piso de la regadera estaba asquerosamente sucio, yo siempre me bañaba descalza. Dentro de la regadera había una sillita chiquita, como de esas que ponen en los jardines de niños; decías que allí te sentabas a llorar, desnudo. Tus padres eran ahorradores de agua, como medida ponían una cubeta dentro de la regadera; era verde según la quiero recordar, el agua estaba siempre sucia, llena de las esencias deslavadas de los cuerpos de tus padres; allí encontramos un grillo muerto (¿te acuerdas?) que me regalaste, olía a podrido y era inútil (como casi todo lo que me regalaste, píldoras, las ramitas que recogías, porque decías que yo andaba entre ramas, palitos, cosas muertas, hilos que recogías de quién sabe dónde, restos de lápices, pedazos de hojas muertas), el grillo se pulverizó, ya te lo dije la otra vez, pero eso es otra cosa. Lo peor de estar en la regadera era bañarse; jamás me salió agua caliente, tú me decías que primero había que abrir la llave del lavamanos para que el boiler encendiera, siempre gritaba en el baño cuando tenía que meterme al agua. El espejo que estaba arriba del lavamanos tenía una mancha en casi la mitad de él, jamás pude verme bien, supongo que a ti te gusta porque odiabas verte reflejado, el lavamanos estaba sucio, y se tapaba, tenía que sacarle el agua con una tinajita. La taza era verde, también como la tina, también como la tina, sucia; pero la taza olía a lo que huelen las personas que están enfermas del hígado, no sé cómo se llama ese olor, pero sí sé a lo que huele. La taza no estaba tan mal, porque tenía un cubre tapa sobre el que me gustaba sentarme a desnudarme para bañarme. Obviamente todo esto carece de sentido ahora, ya no sé si tu baño siga siendo lo que yo recuerdo.

miércoles, junio 5



*De aquí hasta donde ya no podemos ver ¿Cuánto tiempo nos sobra?*